Autor: Prof. Luís Mezones Medina
En su obra Gerencia Interactiva, la investigadora estadounidense Mary Boone (s/f), determina en el capítulo titulado Superación Personal, un total de ocho habilidades necesarias en el gerente de los últimos años, postulando la primera, ser franco y transparente; segunda, mantenerse centrado en los objetivos; tercera, enfrentar los conflictos a tiempo para poder resolverlos; cuarta, preparar buena preguntas que puedan mantener el diálogo para esclarecer las situaciones; quinta, uso conciente y cuidadoso de las palabras; sexta, atender a lo que no se dice; séptima, adaptarse a la comunicación estándar en atención a las diferencias culturales y de personalidades; y octava, dedicar tiempo a la reflexión, “la parada en ruta ayuda a ubicar mejor el norte”.Con la primera habilidad se refiere a la capacidad del Gerente de ser franco, diáfano y sincero al momento de transmitir un mensaje dentro del proceso comunicacional, la razón se centra en el simple hecho de que en la actualidad es muy fácil determinar el estado anímico de las personas, por lo cual sería todo un error encubrir estados de ánimo alterados con palabras calmadas, es mejor expresar lo que se desea comunicar para evitar que el mensaje sea mal interpretado. La segunda habilidad está relacionada con mantenerse fijos los objetivos de la organización, la tercera establece la urgencia de la resolución de conflictos y malos entendidos (siendo la comunicación la herramienta necesaria para resolverlos).
La cuarta habilidad está determinada por la capacidad de preguntar asertivamente para así clarificar la información que se recibe en el proceso de comunicación; la quinta es el uso conciente y cuidadoso de las palabras; la sexta tiene relación con los factores no verbales, debiéndose atender a lo que no se dice, los mensajes no verbales son más efectivos que las palabras.
La séptima habilidad exige adaptarse a una comunicación estándar, directa y formal en atención a las diferencias culturales y de personalidades, esto atiende en lo cultural a la posibilidad de que las personas con las que tratamos de comunicarnos posiblemente no manejen nuestros mismos conocimientos vivenciales y por consiguiente puedan ser mal interpretadas nuestras palabras y por consiguiente nuestro proceso de comunicación en lugar de asertividad, termine generando conflictos; la octava habilidad consiste en la capacidad introspectiva, para revisar que las demás habilidades sean aplicadas de manera correcta.
Fuente Referencial:
- Boone, Mary (s/f). Gerencia Inter@ctiv@. Mc Graw Hill. [Material Fotocopiado]
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